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Adenopatías (linfadenopatías): síntomas, causas, diagnóstico y tratamiento

Qué son adenopatías (linfadenopatías), definición, significado, tipos, características y enfermedades.

Adenopatía - Ganglios inflamados
La adenopatía o linfadenopatía es un término que significa "enfermedad de los ganglios linfáticos". Sin embargo, se utiliza casi como un sinónimo de "ganglios linfáticos hinchados (inflamados) o aumentados de tamaño". Los ganglios linfáticos son unas pequeñas masas de tejido del sistema linfático que juegan un papel crucial en la defensa del cuerpo contra infecciones y enfermedades. Estos ganglios se encuentran por todo el cuerpo, principalmente en el cuello, la axila y la ingle. Cuando se inflaman, puede ser un indicio de diversos trastornos de salud que van desde simples infecciones hasta problemas más serios como el cáncer.

La inflamación de un ganglio linfático se denomina linfadenitis. En la práctica, la distinción entre linfadenopatía y linfadenitis se hace rara vez. La inflamación de los vasos o canales linfáticos se llama linfangitis.

La adenopatía es un término científico que denota el estado patológico de inflamación de un ganglio linfático, y puede tener varios orígenes etiológicos. En términos simples, las adenopatías indican un cambio en el tamaño o en la consistencia de los ganglios linfáticos. Es como si uno de los centros de defensa de nuestro cuerpo estuviera trabajando más de lo normal y se inflamara. La adenopatía indica una hipertrofia de los ganglios. Los síntomas clínicos, las pruebas de laboratorio y de imagen, y una posible biopsia ganglionar, pueden orientar al médico en el diagnóstico de la enfermedad. [1] [2]

TIPOS DE ADENOPATÍAS


Adenopatía por localización en el cuerpo
Las adenopatías se pueden clasificar según su ubicación o según su causa:

- Según ubicación: cervicales (cuello), axilares (axilas), inguinales (ingle), mediastínica (mediastino), hiliar (pulmonar) y retroperitoneal, entre otras.
- Según causa: infecciosas (causadas por virus, bacterias), neoplásicas (causadas por cáncer), autoinmunitarias (causadas por enfermedades donde el cuerpo ataca a sus propias células).

De este modo, puede hacerse referencia a:

- Adenopatía localizada: según el lugar donde se localiza la infección, como, por ejemplo, un punto infectado en el cuero cabelludo que hará que los ganglios linfáticos del cuello del mismo lado se hinchen. Se llaman bilaterales si afectan a ambos lados del cuerpo.
- Adenopatía generalizada: debida a una infección generalizada en todo el cuerpo, como, por ejemplo, a causa de la gripe.
- Adenopatía generalizada persistente: si persiste por mucho tiempo, posiblemente sin una causa aparente.

Además, se pueden clasificar según su duración:
- Adenopatías agudas: duran menos de 3 semanas.
- Adenopatías subagudas: duran entre 3 y 8 semanas.
- Adenopatías crónicas: duran más de 8 semanas. [1] [2]

SÍNTOMAS


Aunque el principal síntoma es el agrandamiento de los ganglios, estos pueden ser dolorosos o no. Otros síntomas asociados, dependiendo del tipo y situación de la adenopatía, pueden incluir:

- Eritema: enrojecimiento de la piel causado por un aumento del flujo sanguíneo en la zona afectada.
- Dolor en la zona donde estén inflamados los ganglios linfáticos.
- Fiebre.
- Cansancio.
- Pérdida de peso sin razón aparente.
- Sudoraciones nocturnas.
- Dificultad para respirar.
- Hepatomegalia (hígado inflamado) o esplenomegalia (bazo inflamado).
- Alteración del estado de salud general.

Cuando un médico revisa los ganglios linfáticos, debe fijarse en el tamaño (generalmente, no deberían ser más grandes de 1 cm), si duelen, su firmeza y su ubicación. [1] [2]

CAUSAS


Las adenopatías aparecen por una reacción del sistema inmunológico a una amenaza, como una infección o un tumor. Las causas más comunes son:

- Infecciones virales, como la gripe, el resfriado común o la mononucleosis infecciosa.
- Infecciones bacterianas, como la faringitis estreptocócica o la tuberculosis.
- Infecciones fúngicas (por hongos).
- Enfermedades autoinmunes, como el lupus eritematoso sistémico o la artritis reumatoide.
- Reacciones a medicamentos.
- Trastornos metabólicos.
- Enfermedades malignas, como el cáncer (como el linfoma o el cáncer de mama). [3] [4]

DIAGNÓSTICO: DETERMINANDO EL PROBLEMA


El diagnóstico de las adenopatías se basa en una historia clínica detallada, un examen físico y, en algunos casos, pruebas de laboratorio. El médico le preguntará sobre sus síntomas, su historial médico y sus antecedentes familiares. También le examinará los ganglios linfáticos para determinar su tamaño, forma, consistencia y movilidad.

En niños, es más común que las causas de linfadenopatía sean benignas. En adultos, aunque la prevalencia de cáncer es baja, siempre se debe tener precaución.

En algunos casos, para descartar una enfermedad grave, el médico puede solicitar pruebas de laboratorio, como un análisis de sangre, una biopsia (extracción quirúrgica) del ganglio linfático, y estudios de imagen como ecografías o tomografías. [5] [6]

PREVENCIÓN


Dado que las adenopatías son una respuesta a diversas enfermedades, la prevención se enfoca en:

- Mantener un sistema inmunológico fuerte.
- Evitar infecciones (a través de picaduras, heridas, mordeduras, etc), practicando hábitos de higiene como lavarse las manos regularmente y evitar el contacto cercano con personas enfermas.
- Vacunarse contra las enfermedades prevenibles por vacunas.
- Realizar chequeos médicos regulares. [7]

TRATAMIENTO


En la mayoría de los casos, las adenopatías son indoloras y se resuelven por sí solas en unas pocas semanas (no obstante, se debe acudir al médico en cuanto aparecen). Sin embargo, si las adenopatías son grandes, dolorosas o no se resuelven por sí solas, es importante recibir atención médica lo antes posible para descartar cualquier enfermedad grave.

El tratamiento varía según la causa:

- Si es una infección, se pueden prescribir antibióticos o antivirales.
- Si es causada por cáncer, pueden ser necesarios tratamientos como quimioterapia o radioterapia.
- En otros casos, no se requiere tratamiento y los ganglios vuelven a su tamaño normal por sí solos. [1] [2]

FISIOPATOLOGÍA: POR QUÉ SE PRODUCEN LAS ADENOPATÍAS


Los ganglios linfáticos son órganos de filtración y drenaje de la linfa en determinadas zonas de la anatomía. La unión precoz de los antígenos (sustancias, generalmente proteínas, que el cuerpo reconoce como extrañas) a los linfocitos (glóbulos blancos), garantiza una inmunidad permanente.

La arquitectura normal del ganglio linfático muestra los folículos (pequeños centros de actividad en el ganglio, donde las células del sistema inmunológico se reúnen y trabajan juntas para defender al cuerpo de infecciones y enfermedades) con los linfocitos B y las zonas interfoliculares de los linfocitos T, limitado todo ello por una cápsula. La proliferación de los linfocitos cuando se produce una infección rediseña por completo esta arquitectura normal del ganglio.

El agrandamiento de los ganglios se da del siguiente modo según la causa:

* Una proliferación de linfocitos reaccionan a una estimulación antigénica local (infecciosa o tumoral) o general (infecciosa o autoinmune).
* Una proliferación tumoral de tejido linfoide (en el linfoma de Hodgkin o no Hodgkin).
* Una acumulación de células patológicas filtradas a través de los ganglios linfáticos (bacterias o células tumorales). [1] [2] [8]

SITUACIÓN DE LOS GANGLIOS


Los ganglios linfáticos palpables se encuentran en sitios específicos:
* Regiones cervicales (anteriores, posteriores, submandibulares).
* Regiones inguinales (derecha e izquierda).
* Regiones axilares o supraclaviculares (derecha e izquierda).

CARACTERÍSTICAS DE LOS GANGLIOS INFLAMADOS


* Duros, leñosos.
* Suaves, elásticos.
* Resistentes.
* Móviles o fijados en planos profundos.
* Dolorosos de forma espontánea o durante su palpación.

Estas características son importantes a la hora de determinar la causa de las adenopatías. [8]

ENFERMEDADES ASOCIADAS


La inflamación de los ganglios linfáticos es un síntoma común de diversas enfermedades, benignas o malignas, como las que se indican a continuación:

* Reactivas: infección aguda (por ejemplo, bacteriana o viral), o infecciones crónicas (adenitis tuberculosa, enfermedad por arañazo de gato).
- El síntoma más característico de la peste bubónica es la extrema hinchazón de uno o más ganglios linfáticos que sobresalen de la piel como "bubas". Los bubones menudo se necrosan e incluso pueden romperse.
- La mononucleosis infecciosa es una infección viral aguda cuya marca característica es el agrandamiento de los ganglios linfáticos cervicales.
- Es también un síntoma del ántrax cutáneo, el sarampión y la tripanosomiasis africana humana, dándose éstas dos últimas adenopatías en los ganglios linfáticos del cuello.
- La toxoplasmosis, una enfermedad parasitaria, provoca una linfadenopatía generalizada.

* Tumoral:
- Primaria: el linfoma de Hodgkin, el linfoma no-Hodgkin, y la leucemia de células peludas, provocan adenopatías en unos pocos ganglios linfáticos o en su totalidad.
- Secundaria: metástasis, nodo de Virchow, neuroblastoma.

* Etiología autoinmune: por sarcoidosis, lupus eritematoso sistémico, o artritis reumatoide, que producen una linfadenopatía generalizada.

* Etiología inmunocomprometida: SIDA. La adenopatía generalizada es una señal temprana de la infección con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), el virus que causa el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). El nombre "síndrome de adenopatía" se ha utilizado para describir la primera fase sintomática de la progresión del VIH, antes de un diagnóstico de SIDA.

* Las mordeduras de algunas serpientes venenosas, con más probabilidad la mamba negra, las kraits, serpientes marrones de Australia, serpientes del coral, serpientes tigre, taipanes, y algunas de las especies más tóxicas de cobras.

Patrones de adenopatía benigna (reactiva)


Hay tres patrones distintos de adenopatía benigna:

* Hiperplasia folicular. Los "puntos de encuentro" o folículos en el ganglio linfático están creciendo o aumentando en número porque hay mucha actividad del sistema inmunológico en esa zona. Típica de infecciones, trastornos autoinmunes y reacciones no específicas.
* Hiperplasia paracortical. Cuando una zona específica del ganglio linfático, llamada paracorteza, se expande o crece debido a una actividad intensa del sistema inmunológico. Típica de infecciones virales, enfermedades de la piel y reacciones no específicas.
* Histiocitosis sinusal. Hay un aumento de unas células, llamadas histiocitos, en las áreas de los ganglios linfáticos conocidas como senos. Es como si hubiera más "limpiadores" en ciertos caminos del ganglio, recogiendo y procesando partículas y células extrañas. Se da en los ganglios linfáticos que drenan las extremidades, en lesiones inflamatorias y en neoplasias (cánceres). [1] [2] [4]

CONCLUSIÓN


Las adenopatías, o linfadenopatías, son inflamaciones o agrandamientos de los ganglios linfáticos, los centinelas de nuestro sistema inmunológico. Estos ganglios juegan un papel crucial en filtrar sustancias y ayudar en la lucha contra invasiones de microbios o partículas extrañas en nuestro organismo. A lo largo del artículo, se destacó que las causas de estas inflamaciones pueden variar desde infecciones simples, como un resfriado, hasta enfermedades más graves. Los síntomas, a su vez, pueden ir desde un simple bulto palpable hasta signos más alarmantes dependiendo de la causa subyacente. Un diagnóstico adecuado es esencial para determinar la causa exacta y garantizar un tratamiento adecuado. A través de técnicas de prevención y una comprensión profunda de sus características, podemos manejar y tratar las adenopatías de manera efectiva. Las adenopatías son un signo común de enfermedad. En la mayoría de los casos, son indoloras y se resuelven por sí solas en unas pocas semanas. Sin embargo, si las adenopatías son grandes, dolorosas o no se resuelven por sí solas, es importante consultar a un médico para descartar cualquier enfermedad grave.

Fuentes: